Jugar y Ganar sin humillar

Se establece un sistema de competición donde lo importante es jugar, divertirse y adquirir en juego, actitudes que se han ensayado durante los entrenamientos y donde los resultados y la clasificación no es importante. Un sistema que lo que pretende es hacer ESCUELA DE FUTBOL. Estamos hablando de las categorías inferiores de nuestro fútbol, benjamines y prebenjamines, donde a nuestros hijos se le intenta enseñar lo "bonito" del deporte rey y donde unos valores puramente deportivos alcanzan o deben alcanzar su máximo esplendor, al menos en la teoría, que tiempo tendrán, conforme pase el tiempo, en ir perdiendo todo este espíritu deportivo.....

Pero dentro de ese juego de "lo importante es participar" y donde ganar o perder no tiene importancia, para el niño, tiene una especial valor saber si han ganado o no y cuantos goles han metido o cuantos goles han encajado y además quieren saber que jugador mete más goles.....y preguntan y a pesar de que en ocasiones, no siempre, su entrenador, quiere restar importancia a estas preguntas y desvía la atención del "pequeño jugador" a otros aspectos más puramente deportivos, otra vez se fomenta esta competitividad y se resalta el gol por el gol, el ganar por encima de todo, en lugar de sólo aprender a jugar, aún a costa de saber, que de esta forma, a la vez que fomenta la ambición de un equipo o de un jugador, echa por tierra, la ilusión de otro jugador y de otro equipo.

Por eso, en estas categorías de nuestro fútbol, donde juegan equipos con jugadores con uno o dos años de diferencia y donde la fortaleza física, se nota demasiado, valores como la amistad, el compañerismo, el juego limpio y las actitudes positivas del deporte, deben primar sobre la simple victoria o la consecución del gol por el gol y al final terminar ganando, esta claro, también es importante para fomentar la idea de superación, pero no a costa de endosar un "capazo" de goles y de humillar al contrario, porque a la larga, la actitud del niño se fragua en función de esa gran victoria humillante ante el contrario o en función de esa gran derrota humillante ante el contrario.....y todo esto no tiene que salir del niño, porque no tiene capacidad para saberlo hacer, sino de quien le enseña, de su profesor-entrenador, porque no olvidemos estamos en Escuela de Fútbol.