viernes, 25 de febrero de 2011

Un ateo marca la X

El doctor José Manuel López es especialista en Oncología en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander (Cantabria). No lo conozco de nada pero en un curioso artículo publicado en la sección de opinión del Diario Montañés asegura que marca por convencimiento todos los años la equis en la casilla de la Iglesia cuando hace su Declaración de la Renta. Y eso a pesar de declararse ateo:

"Si es reprochable empezar hablando de uno mismo, también será esclarecedor decir de entrada que mi pensamiento y mi vida discurren ajenos a los dioses, en general, y al Dios de los católicos en particular.

No comulgué ni fui confirmado, me casé por lo civil, mis dos hijos no fueron bautizados y han estudiado en escuelas laicas, como su padre. Por lo breve, digo, ni soy católico ni aguardo orientación de ninguna fe religiosa, la que fuere". Para después añadir: "¿A qué viene, entonces, mi chocante postura de destinar la X del IRPF a la Iglesia Católica? Algunos la tildarán de gracieta simplona, otros de contradicción incomprensible, de inane provocación, etcétera. Nada opongo a tales opiniones, menos aún si sustentan la idea, más o menos refinada, de que seré aproximadamente un gilipollas. Pero si alguien desea curiosear en por qué un ateo marca su X a favor de la Iglesia, quizá le interesen mis tres razones principales"

Tres razones que vienen desarrolladas en el artículo que merece la pena leer completo y que se pueden resumir en: 

1) La Iglesia católica es históricamente la organización benéfica más eficiente: "No estableceré un ranking de altruismo, pero yo, siendo ateo, dudo que los recursos administrados por la Iglesia sean desdeñables o necesariamente sustituibles: voto por mantenerlos".

2) Es difícil entender, y entendernos, Europa obviando el catolicismo: "Asistí recientemente a la misa dominical en un convento de clarisas, con su olor inefable a musgo e incienso. A mediodía, las monjas ocupan un coro, allá por el ábside; los fieles llenan la pequeña nave y el cura lee sugestivos textos, y lo hace bien, y por un momento me siento parte de algo más grande y más permanente que yo, algo que sosiega la respiración y atempera el pulso, sin necesidad de lapidar a nadie. Y luego visité otra iglesia, donde se cantaban bellísimas habaneras de tema religioso. Voto por ese espíritu de paz y concordia, aunque yo no sea creyente".

3) Está harto de la beligerancia que existe contra la Iglesia Católica en nuestra sociedad española: "Justo por no serlo, me parece inexplicable el furor obsesivo por bajar los crucifijos de los colegios. No veo qué daño causan los símbolos de una fe que no me asiste, pero sí ilustra mi paisaje histórico y emocional. Me espanta el fanático que se jacta de clausurar escuelas católicas o quemar frailes. No concibo que un absurdo revanchismo haga saludar a gobernantes infames como Chávez y ningunear al Papa, líder espiritual de muchos compatriotas. A mi juicio de ateo, es lógico y deseable que el Estado sea laico, pero sucede que España no lo es. Hay vida inteligente fuera del Estado, así que pongo la X para la Iglesia Católica, no vaya a ser que algún insensato la destine a construir mezquitas y tengamos que resucitar a don Juan de Austria". 

Doctor José Manuel López. Rara Avis.



miércoles, 16 de febrero de 2011

SAN VALENTIN

De la otra orilla del mar, establecieron que un día, como el 14 de febrero, San Valentín (hasta tres santos valentines tienen su onomástica ese día), fuese el día de los enamorados.

Y como nosotros somos muy dichos a copiar lo de fuera, por ejemplo Papa Noel, Halloween, etc…..despreciando incluso muchas veces lo propio, enseguida y sin que nadie nos convenciera, bueno si, después de que nos convenciera Galerías Preciados, adoptamos este día “comercial” para tener una excusa más para gastar nuestros ahorros, incluso aunque  no tengamos esos ahorros. Somos así.

Ese día estamos obligados a estar enamorados…..el resto del año da igual, pero el 14 de febrero sería imperdonable no acordarse de la “parienta” y diré “parienta” femenino, porque como escribo yo y yo soy masculino, me referiré al sexo femenino, aunque hoy en día, también podría referirme al masculino, pero ese no es mi caso, se lo aseguro.

En vísperas de ese día, incluso en una ciudad pequeña como la nuestra, los comercios, por supuesto las floristerías, uno de tantos días en los que es obligado comprar flores, además de pastelerías y otros varios más, adornan sus escaparates, para que nos acordemos ese día de nuestro “amor”. Es obligatorio.

¿Y el resto del año?.....quizás ¿da lo mismo? ¿con que nos acordemos en este día es suficiente? ¿compramos un detalle y ya cumplimos?.....¿y después?

Dios mío. Como nos llevan a donde ellos quieren, como esta sociedad de consumo nos hace caminar por donde ellos abren el camino, decidiendo por nosotros.

Intento revelarme contra este comercio que juega con sentimientos, intento no celebrar este día, al final no lo consigo, es complicado abstraerse de la generalidad, pero prometo, al menos, intentar celebrar San Valentín, como patrón de los enamorados, los 365 días del año….si todos hiciéramos lo mismo, a lo mejor este mundo iría, a la misma velocidad, pero con más PAZ. Soñemos un poco que cuesta barato y esto todavía no se vende en las tiendas.


No se si lo conseguiré, pero lo intentaré, intentémoslo y hagamos un regalo de “amor” cuando queramos y como queramos, no porque alguien nos lo diga. Felices sueños.




martes, 8 de febrero de 2011

PE y JA

Escrito de Alfonso Ussia. La Razón. 27 de Enero de 2011

Se ha echado de menos un comunicado oficial anunciando la buena nueva del parto de Penélope Cruz, la Pasionaria de Alcobendas. Ha sido un niño. Enhorabuena. Ha nacido en Los Ángeles, en los Estados Unidos, y no en Cuba. Enhorabuena. De esta manera, el niño podrá optar a la nacionalidad estadounidense cuando alcance la mayoría de edad. Enhorabuena. El nacimiento ha tenido lugar en el hospital Cedars-Sinaí, uno de los más caros del mundo. Se calcula que la factura no bajará de los cien mil euros. Enhorabuena por tenerlos. En España sale más barato, pero los padres son muy dueños de decidir el lugar de acceso a la vida de sus hijos. Me aseguran mis informadores de partos ilustres que tanto el padre como la madre han luchado denodadamente contra sus ideas, y que las ideas han resultado derrotadas. De haber vencido las ideas, el parto se habría producido en Cuba, cuyo nivel médico y asistencial es altísimo, según dicen algunos. Pero no ha habido suerte. Tiene que ser muy dolorosa la militancia comunista para terminar dando a luz en el hospital más caro y exclusivo del imperio capitalista. Me estremezco cuando lo pienso. Porque el padre y la madre del niño recién nacido no son izquierdistas del montón. Forman parte de la cúpula ideológica y de agitación y propaganda del comunismo austero que todo lo comparte. En el hospital de Cuba le obligaban a la madre a compartir habitación con una camarada cubana, y hasta ahí podíamos llegar. No hay que fiarse de las jóvenes cubanas de hoy, tan alejadas de los principios básicos de la Revolución. Además, que por culpa del bloqueo, no se garantiza en Cuba la disponibilidad de determinados medicamentos. De ahí que la pareja revolucionaria española haya decidido que su hijo nazca en el hospital más caro de la nación que impone el bloqueo a los cubanos. En España no hay bloqueo que valga, pero se entiende que en las actuales circunstancias políticas, económicas y sociales por las que atraviesa nuestra nación, lo de nacer en España les haya parecido poco. El glamour rojo también existe. Y la última opción, la de tener un hijo en un campamento saharaui con Aminatu Haidar colaborando en el parto, la verdad, y en esto les doy toda la razón, no podía ser tenida en cuenta. La militancia comunista no obliga a tanto sacrificio. Es legítimo sentirse de la más escorada izquierda y vivir como un millonario americano. Pedir ejemplaridad y coherencia entre las ideas y la realidad, o entre la teoría y la práctica, es una impertinencia muy propia de la gente de derechas, cuyas mujeres, muchas de ellas, dan a luz todos los días en las clínicas de la Seguridad Social. Y ahí está el problema. La Seguridad Social fue obra del franquismo –el propio Franco murió en uno de sus hospitales–, y un comunista que se precie de serlo no puede consentir que su hijo nazca en un hospital del régimen anterior. Sería imperdonable.
Pe y Ja han hecho muy bien. Tiempo habrá para levantar el puño, protestar contra el Gobierno del Partido Popular, llamar asesinos a sus dirigentes, volar al Aiún cuando sea necesario, descansar en Cuba como invitados del Régimen bloqueado, y seguir viviendo en la imperialista nación que bloquea a los cubanos. Tiempo habrá. Lo importante es que el niño ha nacido en Los Ángeles, que está bien, que a la madre nadie le molesta ni interrumpe, que todo marcha de maravilla y que cien mil euros por un parto tampoco es para escandalizarse.
Arriba los pobres del mundo, en pie famélica legión.