Celebración del GOL

Mira que cada día que pasa, con esta historia del correr que llevo entre manos, mejor dicho entre piernas (valga la expresión) me atrae menos la pasión futbolista, pero no me resisto a comentar los acontecimientos que rodean, a ese mal llamado "deporte rey".

Y me referiré hoy al partido jugado entre el Rayo Vallecano, equipo humilde donde los haya y el todo poderoso Barcelona, donde se evidencio, de forma notable, la gran diferencia existente en la mejor liga del mundo, donde el primero, en esta temporada le ha tocado al Madrid, le lleva en estos momentos, ni más ni menos que 36 puntos de diferencia al tercero, más de los que tiene el Zaragoza o el Sporting y donde el máximo goleador, en este caso, los máximos goleadores, dos, llevan, más de veinte goles de distancia respecto al tercer mejor artillero.

Al final del partido, me imagino la cara de los seguidores del Rayo, cuando se llevan para casa, siete humillantes goles. Y si a esta circunstancia, ya dura de por si, se le añade el sarcasmo y la burla, al final, el sufrido espectador que ha pagado su nada barata entrada, para ver un espectáculo de fútbol, es lógico y hasta comprensible, que vierta su frustración y pida la pena capital, como si circo romano se tratara, para aquel, que en este caso, aún siendo vencedor, ha hecho de su triunfo una burla.

Me estoy refiriendo a esa pantomima de baile que dos jugadores del Barcelona realizan cuando han conseguido meter el quinto gol de la tarde y que el aficionado que esta viendo que el equipo de sus amores y de su penares, esta siendo humillado por el rival, observa, con sorpresa y justa indignación.

Para mi la explicación esta en que, o bien el que realiza este gesto es muy chulo y hay que reconocer que alguno lo es, quizás porque su cuenta corriente le permite mostrar esos signos de superioridad manifiesta o bien, su incultura es tal, que no es capaz de discernir, lo que esta bien o lo que esta mal, cuando de educación y respeto se esta hablando, en este caso, al contrincante deportivo.

Lógico es celebrar el gol, con tremenda alegría si es necesario, ahora bien, siempre con respeto al contrario y a la afición que lo sustenta y en este caso, el señor Alves y el señor Thiago, no estuvieron a la altura que un deportista debe demostrar, sobre todo en el terreno de juego, donde muchos niños, hacen de estos jugadores, mitos y referencias en sus vidas.

De aquí mi desprecio a su actitud y a su comportamiento y el día que encuentren la otra cara de su moneda, recordaran lo mal que se comportaron un día en Vallecas, aunque a lo mejor, les da igual.

Ahora bien, el que este libre de pecado que tire la primera piedra.... lamentablemente, celebraciones de este tipo, se han hecho varias y en diferentes campos de fútbol. No es este el primer caso y por supuesto no será el último, porque si de algo destacan algunos de estos multimillonarios que golpean el balón, es de tener muy poca cultura. Pero resulta curioso, que he podido observar un vídeo, con varias de estas celebraciones y casi siempre, están los mismos protagonistas.....por lo que la generalización, en esta caso, sería tremendamente injusta.

Por cierto, al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios.... bien por Puyol que puso un poco de sensatez donde había estupidez y por las disculpas de Guardiola en sala de prensa.