Como escribía ayer

Después de cinco años de estar en prisión, acusado por la bendita inquisición, de haber traducido a una "lengua vulgar" un libro santo, al volver a su cátedra en la Universidad de Salamanca, Fray Luis de León, dijo a sus alumnos "Como decíamos ayer..." y bien sabe Dios que no pretendo la osadía de quererme parecer a nadie de la talla de tal insigne maestro, pero después de estar un tiempo sin plasmar por escrito "sensaciones", aunque siempre sin dejar de pensar en las mismas, el hecho de poder volver a escribir, me llena de satisfacción y esta pausa desde la última vez que me atreví a "juntar letras" para decir algo aquí, parece que la acortaré en el tiempo, si empiezo diciendo...... "Como escribía ayer....." aunque no sea verdad.

La única verdad es que no siempre tienes el tiempo necesario para hacer esta o aquella cosa que empezaste hace un tiempo y siempre hay, y más en los tiempos que corren, obligaciones primordiales que cumplir.

Primero hay que dedicar tiempo para "ganarse la judía", como dirían nuestros abuelos, es decir, para trabajar. Bienaventurados los que todavía podemos hacerlo. Y después aprovechar el poco tiempo libre que nos queda, para disfrutar de la familia y de los amigos, que el tiempo, vive Dios, pasa deprisa y esos granujillas que correteaban  por el pasillo hace poco, empiezan a correr por las calles, detrás de mozuelos y mozuelas, que Dios sabe que intenciones tendrán. Una preocupación más. Se nos han hecho mayores y miramos hacia atrás pensando que hemos perdido el tiempo y que ya no lo podemos recuperar y nos agarramos a un clavo ardiente para no perder más tiempo todavía.

Además luego esta el verano, que siendo el día más largo y con el calorcillo, te invita a realizar esas actividades, que el largo invierno te bloquea.

Y de esta forma te pasan los días y aunque siempre haces el firme propósito de ponerte a reanudar lo que has dejado parado, nunca encuentras el momento. Ya llegará el invierno, piensas.....y tendré tiempo.

Pero uno tiene la desgracia de querer seguir lo que ha comenzando y no me resulta fácil romper con las actividades que he iniciado, a pesar de que haga el firme propósito, como si fuera año nuevo, de ir dejando cosas que ocupan tiempo y memoria y que me impiden disfrutar de otras cosas que tenemos que saber valorar con más ilusión, sobre todo cuando has traspasado la barrera de una cierta edad.

Así que, ahora, a pesar de que no asuma la realidad, de que prácticamente han terminado las vacaciones y aunque aún nos quedan las fiestas del pueblo por delante, antes de que comience el invierno en  nuestra ciudad, como todos los años, el 9 de septiembre, encuentro un momento y me pongo a decir algo, para desgracia de todos aquellos que en su día leyeron lo que aquí se contaba y que cuando hoy les mande un email y les diga "mi blog, por fin, se ha actualizado" tengan la osadía de acercase por aquí a "perder" y lo pongo entre comillas, su tiempo.

Si eres sensato, no pierdas mucho tiempo, aprovecha el buen clima que nos queda de este año, sal a la calle y tomando una cerveza, vive con tu familia y con tus amigos, que cuando te quieras dar cuenta, a lo mejor ya no tienes el tiempo ni las ganas para poder hacerlo.

FRAY LUIS DE LEON